Scuccia aseguró entre risas que se espera una llamada del papa Francisco por su intervención en el popular programa. "Él (Francisco) nos invita a salir y a evangelizar, a decir que Dios no nos quita nada, sino que incluso nos da todavía más", dijo, tras lo que sobrevino una nueva aclamación por parte de los espectadores.
La monja se refería a la conocida afición del papa a telefonear por sorpresa, como cuando llamó a su quiosquero de Buenos Aires para que no le guardara más el periódico o a las Carmelitas Descalzas de Lucena (Córdoba) para desearles un feliz Año Nuevo.
Los cuatro miembros del jurado intentaron de manera animada convencer a la religiosa para que escogiera sus equipos. Finalmente Scuccia se decantó por el del rapero italiano J-Ax, "por ser el primero que se dio la vuelta". "Tú y yo somos imbatibles. ¿Sabes por qué? Somos el diablo y el agua bendita. ¡Ven conmigo!", fue el mensaje de J-Ax para su nueva compañera de concurso.