30 de septiembre de 2014

ENTRE MAESTROS


Dos maestros distintos, una entrañable amistad y un tema común “La Universalidad Masónica y el Antiguo Grande Oriente Español”. El Catedrático de historia contemporánea en la Universidad Pontificia de Comillas, e investigador jesuita Pedro Álvarez Lázaro; autor del libro La masonería escuela del ciudadano. Y el Pasado Venerable, Knight Templar Priests y miembro de las Grandes Logias de Nuevo León (México) e Inglaterra; IPH. Marino de Armas Benítez.   

El masón debía perder el sentido del localismo por ello la Universalidad. Antiguamente viajaban fundando franquicias masónicas, instruyendo a los aprendices y construyendo Catedrales. La mentalidad masónica originaria era abierta, artística y espiritual. Hacían uso de un lenguaje grafico y simbólico en las piedras, alcanzando un papel determinante en una sociedad medieval mayoritariamente iletrada.

En el siglo XVII los gremios y las logias se abrieron a distintas personalidades independientes, no sólo del sector de la construcción sino de la burguesía e intelectualidad. Surgiendo los masones “aceptados”, quedando influenciados por las ideas científicas y pedagógicas.  Conformándose paulatinamente el ideario de sus miembros: una sociedad humana perfeccionada en base a la ciencia.

Hoy contemplamos en algunos lugares con tristeza, la paulatina pérdida de valores que antaño nos caracterizaron y como algunos francmasones dirigen sus anhelos al oropel de los mandiles. Olvidando los Antiguos Usos y Costumbres de la Masonería Universal, y los Landmark Masónicos…continuara.